YA NO QUEDA NADA
Se me escapa entre los dedos
el amor que ayer te daba
como aire, como tierra, como agua,
hoy ya no queda nada.
Y te vas sin dar la vuelta,
y te miro y veo tu espalda.
Siempre pasa lo mismo, siempre,
cuando ya no queda nada.
Escucho aquella música
la que escuchábamos, tu y yo, lejana.
Y me acuerdo de los días, y las noches...
ahora ya... ya no me dice nada.
COMUNERO